dimecres, 31 de desembre del 2008

Viveros ACB (IV): En la mente de los cazatalentos


En este artículo, penúltimo de la serie Los viveros de la ACB, viajamos a la mente de los cazatalentos. El objetivo de esta nueva entrega a cargo de Álex Gozalbo, es tratar de entender en qué se fijan los ojeadores y los directores de cantera a la hora de apostar por un jugador en proceso de formación. Para ello repasamos los nombres y peculiaridades de la estructura de cada uno de los 18 clubes de la ACB, así como el proceso que lleva a un chaval que destaca en un partido de categorías inferiores a triunfar en la máxima categoría española.

Desde que los clubes se fijan en un jugador hasta que éste está en condiciones de debutar en la ACB hay un largo camino donde nada se deja al azar. En el Unicaja es Ramón García, director de cantera, quien se encarga de coordinar todo el proceso. Su misión consiste en proporcionarle al jugador todo lo que necesita para evolucionar, pero no sólo en la pista. Gracias al trabajo de Armando Reyes, catedrático de la Universidad de Málaga, y Carlos Salas, jefe de los servicios médicos del Unicaja, en tres meses hicieron que Andre Bamogo ganara nueve kilos. Pese a este dato, García todavía no está contento: “Tiene un físico privilegiado, para jugar sin ningún problema en la elite, pero tiene que ganar por lo menos 25 kilos para poder hacerlo”. Y en ello están.En cada parque de Badalona hay una cancha de baloncesto. El trabajo de Jordi Martí, responsable del baloncesto base, y de Joan Rallo, director de la escuela de basket, es trasladar esa pasión a la cantera del DKV Joventut. Martí entró en el club a los siete años y, por tanto, conoce como pocos tanto la casa como las necesidades de las jóvenes promesas. Y es que la Penya es uno de los clubes que más se preocupa por la formación integral de los jóvenes, a quienes proporciona tutores que garantizan su correcta evolución fuera de las pistas. Esta preocupación también es compartida por el Winterthur FC Barcelona, cuyo adjunto a la dirección técnica Edu Ubach le dedica una preocupación prioritaria a los aspectos extradeportivos.En el Winterthur FC Barcelona la cantera depende de Joan Montes, director técnico del club, que siempre tiene un consejo para tratar de algún aspecto de su formación. “Si un par de jugadores utilizan algún detalle de técnica individual en un partido, ya habrá valido la pena”, explica Montes.La constancia es básica para trabajar en el mundo del baloncesto base. Josep Bordas, responsable de cantera del ViveMenorca, lo resume así: “La idea es ir dando pasos sólidos, que cuando pongamos una piedra, ésta ya no se mueva”. Para lograr este objetivo, Bordas tiene claro por dónde empezar: “En la organización y en la formación de los entrenadores. Además hay que cambiar la mentalidad de los chicos del colegio. Debemos saber que hay dos nortes: recuperar el espíritu de orgullo del jugador de La Salle y trabajar para generar jugadores para la cantera ACB”, explica.Eso sí, como en todo buen plato, cocinar una cantera necesita su tiempo. “Entre cuatro y cinco años. Cada año se verá una mejora, pero hay que tener paciencia”, recuerda Josep Bordas.Comparte el TAU Cerámica con el ViveMenorca la idea de que es básico el trabajo de los entrenadores. Para ellos tiene colgada en su página web oficial una lista de “Consejos para la cantera”, donde los técnicos pueden consultar ejercicios específicos para enriquecer sus entrenamientos. No suele ser habitual, pero a veces algunos directores de cantera comparten el cargo con el de entrenadores de algún equipo filial. Es el caso de David Gil, que dirige al Fundación Baskonia de Primera División.El objetivo de los responsables de cantera de los clubes ACB es claro: olvidarse de los resultados puntuales y centrarse en la formación de las jóvenes promesas. Así lo entiende Alonso de Madariaga en el Real Madrid. El entrenador del filial blanco, Alberto Martín, lo resume así: “Se trata de que los jugadores alcancen su potencial, de que se formen en unas competiciones donde la mayoría de los equipos están formados por gente muy veterana”. Es el caso de la Adecco LEB 2, donde milita el segundo equipo del Real Madrid.El conjunto blanco disputa todos sus partidos en el Pabellón Jorge Garbajosa de Torrejón, donde se entrena diariamente. Allí, Alberto Martín, junto a su cuerpo técnico, prepara a sus chavales física y mentalmente: “Es importante que estemos preparados para sufrir. Nosotros tenemos que preocuparnos de ir mejorando en los entrenamientos, de coger ritmo, de que cada uno se vaya poniendo en forma. Sólo así llegarán los resultados”.La cantera del Pamesa Valencia también está en buenas manos. Ángel Fernández es su director y tanto Miki Vukovic, director técnico de formación, como Nacho Rodilla, su adjunto, complementan su trabajo. Además el club cuenta con la aportación de Toni Muedra, un especialista en encontrar jóvenes talentos debajo de las piedras. “A mí me gusta viajar mucho para ver a los chavales en directo y no a través del vídeo, donde se pierden muchas cosas. Es una profesión que me gusta, pero también te pasas muchas horas viajando solo de hotel en hotel. Eso sí, cuando hay un campeonato importante como un europeo, nos encontramos todos los especialistas en detección de talentos”, explica Muedra a ACB.COM.Este ojeador del Pamesa tiene una completa base de datos ordenada por generaciones, con informaciones clave de los jugadores más interesantes. “Cuando son pequeños les dejamos continuar entrenándose con su club y vienen a Valencia de forma periódica para realizar entrenamientos específicos. Además, acuden como complemento a varios campeonatos anuales. Luego, los que más posibilidades tienen se incorporan a los equipos de base”, detalla Muedra. “Cada vez está más difícil encontrar jugadores que no hayan sido descubiertos antes, por eso es básico anticiparse. Para ello, nosotros contamos con una red de colaboradores a tres niveles: Comunidad Valenciana, España y resto del mundo”, argumenta.Como explica Muedra, los viajes son una constante en la agenda de estos especialistas cazatalentos. Pablo Camacho, por ejemplo, estuvo en el mes de marzo en Brasil. El talento y el físico mandan, pero el responsable del Caja San Fernando adelanta una característica que también hay que valorar: “Si tienen ascendencia europea, mejor”, confiesa.Una de las obsesiones de los responsables de cantera es la facilitar la transición de los jugadores jóvenes hasta el baloncesto profesional. Por eso Luis Guil (Alta Gestión Fuenlabrada), que se dedica a rematar el trabajo que desde alevín hasta cadete realiza Armando Polo, valora tanto el Circuito Sub 20: “Es la guinda que les faltaba a los jugadores porque pasaban de júniors a séniors sin estos torneos intermedios”.El volumen de jugadores a controlar es tan grande que la mayoría de clubes optan por llegar a acuerdos con otros equipos de la misma localidad, cerrando con ellos acuerdos de vinculación. Este aspecto es uno de los que Óscar Fernández-Arenas ha desarrollado desde su llegada al CB Granada: “Con el nacimiento de la Fundación se nos presenta una oportunidad muy bonita, a la vez que un reto apasionante de cara a proyectos como el de las escuelas. Pretendo que la cantera del club se caracterice por su actividad y por mantener una excelente relación con los otros colegios y clubes de la ciudad”.Otra de las vías para detectar promesas son las pruebas de selección. Felipe Martín es quien organiza la cantera del Grupo Capitol Valladolid y tiene claro qué es lo que hay que buscar en este tipo de procesos de selección: “No se trata de descubrir talentos porque todos los que juegan en equipos federados ya los seguimos de cerca a lo largo del año, sino de ver el nivel de ilusión y de compromiso, además de algún tipo de cualidades. Antes era la operación altura, pero en el baloncesto moderno la altura cada día tiene menos importancia y sí los conceptos y la mentalidad de equipo”, reconoce.Los mejores jugadores de cantera se suelen reunir en el Circuito Sub 20 o en el Campeonato de España de su categoría, pero también hay eventos alternativos. En edad júnior L’Hospitalet es la cita con más prestigio, pero hay muchas más y varias de ellas se disputan en las Islas Canarias. El pasado 28 de octubre, por ejemplo, el I Torneo Ibsa Gran Canaria para chavales de minibasket. Y es que, como bien sabe Víctor García Guadarrama, director de cantera del Gran Canaria Grupo Dunas; los clubes empiezan a utilizar este tipo de eventos para controlar a los niños más prometedores.
Los ojeadores valoran mucho asistir a partidos reales. El motivo lo resume Joan Vives, que imparte la asignatura de Detección de Talentos en los cursos para entrenadores de la Federación Catalana: “Hay que ver si el jugador tiene adquiridas y automatizadas las acciones que realiza en un entrenamiento y, para ello, hay que verlo en situaciones reales de estrés, es decir, en los partidos”, recuerda. Además, Vives aconseja no fijarse sólo en las habilidades técnicas y darle importancia a los aspectos sobre los que se construye la personalidad del jugador, como su entorno familiar y su estabilidad emocional.Entre Luis Guil y Armando Polo no paran de buscar iniciativas nuevas para atraer a nuevos jóvenes al Alta Gestión Fuenlabrada. La última es el primer Campus Urbano, que se celebrará del 26 al 29 de diciembre en el polideportivo El Arroyo. Tampoco se quedan de brazos cruzados Pere Capdevila y Francisco José Collado, que coordinan las canteras del Akasvayu Girona y el Etosa Alicante. Cualquier idea puede funcionar.Pese a que los jugadores de cantera cuentan con el estímulo constante de llegar a la ACB, los clubes suelen buscar estímulos para premiar su esfuerzo. Mariano Nieto (Polaris World Murcia) es un especialista en sorprender a los muchachos. Hace apenas unas semanas los jugadores cadetes fueron sorprendidos en el entrenamiento con la visita del base Goran Dragic, que acudió a la sesión de trabajo para darles consejos y revelarles algunos de sus trucos en la pista. “Fue una gran experiencia, sobre todo porque los pequeños jugadores muestran mucho interés por lo que tú les cuentas. Para mí fue un orgullo que me lo propusieran”, comenta Goran Dragic.Pero, claro, todo lo expuesto en este artículo cuesta dinero y apenas genera beneficios a corto plazo. Es por ello que los clubes se las ingenian para tratar de encontrar ingresos atípicos para esta sección deficitaria. El MMT Estudiantes, por ejemplo, ha llegado a un acuerdo con la cadena de supermercados ‘Ahorramas’, que se ha convertido en el patrocinador específico de la cantera estudiantil, cuyo director es Juan Antonio Cabrerizo.
Artículo publicado en ACB.com el 13 de diciembre del 2006. Consulta aquí el artículo en su contexto original.